Principio

Hola gentes,

la mayoría ya me conocéis de ese fantástico y pacífico mundo que es twitter y puede que alguna llegase a ver mi anterior blog. ¿Por qué he decidido abrir uno nuevo entonces? Pues porque la vida haggard es la vida mejor y ya me quiero olvidar de cosas del pasado. Igual habrá algunos posts que rescataré de aquel blog y los iré pasando aquí hasta que el otro, definitivamente, muera.

Supongo que lo primero es explicar cómo he llegado a este lugar. Ha algunos años ya, yo formaba parte de un selectísimo y exquisito grupo donde sólo criticábamos leíamos libros de categoría. Yo era la jovenzuela del grupo, pero viendo que mis gustos eran tan divinos como los de mis queridas Kim y Cassie, me bautizaron como una futura haggard, una haggard to be.

Fue por esas fechas también cuando tuvieron esa visión de Dior y descubrieron a David Gandy. Pero a mí que Dior me perdone, hay muchos hombres en la vida y todos MeCaben en el tetamen corazón. A Gandy le aprecio, pero no es mi predilecto.

Me largo de aquí antes de que me asesinen por decir eso


Aunque tampoco tengo uno que sea el number one, ¿eh? Yo tengo un grave problema de obsesión: cuando me da por algo, me da a saco, Paco. Si descubro una canción que me gusta, la escucho hasta la saciedad. Si es un grupo de música, escucho toda la discografía. Si es un actor, veo toda su filmografía. Y así es mi vida, que nunca dejo de sumar cosas a mi lista de libros, series, etc.

¡Hasta el guano de tanta lista de pendientes!


Además mi vida laboral es sumamente horrorosa. Estoy siempre de reunión en reunión y de viaje en viaje, todo el día con mi jet privado de un lado para otro. Los negocios son así y yo tengo muchos. Así que no me pidáis milagros, esa lista siempre crecerá y nunca estará vacía. Tampoco os extrañéis que me tire días, semanas e incluso meses sin aparecer. Tengo un trastorno horario terrorífico.

Como es obvio, no me voy a dedicar únicamente a reseñar libros, para eso ya tenemos el blog de mis maestras de la religión haggardiana. Si finalmente me apunto a algún reto lector, sí que haré las reseñas por aquí.

¿Y de qué voy a despotricar hablar entonces? Pues de todo aquello que me produce un éxtasis placer vicio un quéséyo yoquésé tal que no se puede explicar el grado de fanatismo extremo que experimento. Eso incluye a maromos varios (aquí MeCaben todos: actores, presentadores, músicos), reseñas de películas, series, mini series, algún que otro librito, quizás hasta de música. Porque queridas, lo confieso: esta pequeña haggard con todos sus brilli brilli, sus cardados, sus joyas, sus estilismos y sus fungirleos con la novela romántica, esconde un alma rebelde y rockera. Si hay algo de lo que me siento sumamente orgullosa de mí misma es de mi gusto musical y no consiento que nadie en el mundo venga a criticarlo.

¿Queda claro?


Y tras este sutil aviso, me voy despidiendo que tengo asuntos que tratar. Será un placer tenerlas por aquí, darlings.

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