Hercai: Capítulo 1, segunda parte (con spoilers)

Seguimos con el capítulo donde lo dejamos en el anterior post y lo primero que nos encontramos es a Azat llorando desconsoladamente y dándose a la bebida, porque el colega tiene una petaca escondida en su habitación. Acto seguido, se dedica a romper cosas de su cuarto y ya se tira en la cama a seguir llorando. Después tenemos escena de la Yaren que también se dedica a romper cosas mientras llora.

Y así es como perdemos cinco maravillosos minutos de nuestras vidas, viendo como los trastornados hijos de Cihan y Handan se dedican a hacer gala de su maravillosa educación. No sé, a mí cuando me salen las cosas mal, no me dedico a romper cosas de mi casa, hijos de fruta.

Nos trasladan a la habitación de Reyyan, que la pobre muchacha no puede dormir después de todo lo que le ha pasado en hora y media de capítulo y lo que te rondaré, morena. No hace otra cosa que mirar el pedrolo que Miran le ha puesto por anillo y, finalmente, se lo termina por quitar.

Con esta cosa tan grande no hay quien duerma.

Tras esto, pasa algo que no sucede en ninguna telenovela que se haya preciado: Reyyan se pone to melancólica a mirar por la ventana, la cámara se aleja hasta llegar a otra casa, y voilá, aparece Miran que también está mirando por la ventana. ¡Menuda coincidencia! Pero no os penséis que ahí se queda la cosa, porque nuestro Milagro también observa su anillo de bodas, aunque él no se lo quita.

Menuda cara de entusiasmo.

Después de esta coincidencia tan inesperada, volvemos al cuarto de Reyyan, que sigue enfrascada en sus problemas cuando aparece su madre. Reyyan le dice que no se quiere casar, que rompan el compromiso, y la madre que cómo no te vas a casar después de lo que ha dicho tu abuelo. Además...

Claro que no, tonta, ¿cómo me va a gustar? 

Pero todas sabemos que, aunque Reyyan no responda, su mente está clamando al cielo. Nos viene de nuevo con excusas de que no se puede casar con él, porque Yaren está enamorada de él, que la ha maldecido, que ella iba primero... ¡¿Pero qué me estás contando, Reyyan?! ¡¿Acaso esto de casarse va por orden de preferencia?! ¡¿Y qué coño haces preocupándote por Yaren?! En fin, Zehra le dice que no se preocupe por la japuta de Yaren y que se acueste de una maldita vez.

Nosotras practicando para cuando salga Yaren en escena

Al día siguiente, llegan a la mansión Sadoglu nuestras amigas la Jurado y la Gollum, que parece que han ido de rebajas y han dejado el Corte Inglés Turco sin existencias, porque vienen cargadas de bolsas hasta arriba. La Gollum sigue con su cara de muerta habitual, mientras que la Jurado va caminando con su porte habitual de reina magna.

Aquí la más grande soy yo

Besos al aire no sea que esta gentuza me contagie su pobreza

Pasan todas a una sala a hablar del bodorrio que se avecina, pero Handan ve que su hija Yaren está otra vez con la cara torcida, que ya viene siendo tan habitual como el hecho de que Gollum tiene cara de muerta. Handan la mete a rastras en su dormitorio, no sea que monte un espectáculo, pero la niña insiste al jurar y perjurar que su venganza será terrible.

Shut up, biaaaaaaatch!

Volvemos de nuevo con las mujeres de la casa, donde la Jurado le está enseñando a Reyyan y Zehra todo lo que han comprado para la novia. La habitación llena de papeles, bolsas, envoltorios, un puto desastre. Como se nota que no limpian ellas, ¿eh? Derrepenete, la Gollum cambia el gesto atención que esto es poco habitual y le pide a Reyyan que le enseñe la casa, así están un ratito a solas para conocerse. La Jurado flipa ante el cambio de actitud nosotras también, Zehra está desbordante de alegría, y Reyyan todavía no sabe muy bien cómo está, pero ella jamás sería una mala anfitriona, por lo que se van las dos solitas a echarle un ojo a la mansión. Cuando se quedan a solas, la Gollum empieza con el interrogatorio: mira Reyyan que te noto rara, qué te pasa, me lo puedes contar, que vamos a ser hermanas, que puedes confiar en mí. Así to el rato. Reyyan no suelta ni prenda pero la Gollum insiste POR TERCERA VEZ.

¿Aquí que coñ* pasa?

¿Pero quién se ha creído que es la Gollum que ya va por ahí dando órdenes? A mí no me la pega con su carita de muerta, ¿eh? Claro, con tanta puta insistencia, Reyyan finalmente confiesa que no se quiere casar, y la Gollum sonríe como nunca, que no se preocupe que lo hablará con Miran y él romperá el compromiso. A mí ya me parecería bien raro que la hermana de mi novio se ponga tan contenta ante tal declaración, pero Reyyan es un oceano de inocencia y no ve nada raro.

Ya en la siguiente escena nos encontramos a la Gollum advirtiendo a Miran se habrá teletransportado, diciéndole que Reyyan no lo quiere a él. Al principio se queda un poco contrariado, pero finalmente dice que le importa un pepino si lo quiere o no, que se van a casar y ajo y agua vamos, que ajoerse y aguantarse, que no vuelva a entrometerse o se las verá con él. Amor fraternal entre estos dos no veo mucho, sinceramente.

¿Pero por qué coño se tiene que aguantar?
¡¿Qué problema tiene esta tía?!

Volvemos con Reyyan, que se nos ha ido de compras con su madre y Melike (una de las sirvientas de la familia Sadoglu), pero a ella en verdad no se la ve con muchas ganas de compras. Vaga perdida por las calles, y en un momento dado se separa de sus dos acompañantes hasta llegar a una plaza solitaria donde ocurre lo siguiente: 

¡Y estoy aquí! ¡Aquí! ¡Para quererteeeeee!

¿Pero qué dise, loco? ¿Cómo que yo no te quiero?

Anda calla, calla, qué tonterías dices...

Reyyan intenta separarse sin contestar a la pregunta del milagro personificado, peeeero...

"No te vayas tan lejos, moza"

Mírame a los ojos y dime de qué color los tengo.

Estoy entrando en combustión espontánea

Reyyan le echa en cara que es un don Juan, que primero dijo el nombre de Yaren y luego el de ella, pero Miran le dice que ni mijita, que él siempre ha dicho el mismo nombre: Reyyan. Que la quiere única y exclusivamente a ella. Reyyan no termina de creerle e intenta alejarse de nuevo, peeeeeero...

VAIS A PROVOCAR UN INCENDIO

Después de semejante acercamiento, que te deja cual pollo sin cabeza, Reyyan demuestra la sangre fría que tiene y termina empujándole. Que no le cree ni una palabra y que no lo quiere, hostia ya. A Miran el tema le hace gracia y termina dejándola ir, pero sin dejar de mirarla y de sonreír de esa manera tan pícara que tiene, el jodío... Lo que no sabían ninguno de los dos es que había cierto personaje espiándoles...

Azat loco de contento porque ve que todavía hay esperanzas.
De ilusos está el mundo lleno.

Azat espera a que Reyyan se largue de allí para terminar encarando a Miran, al que ya le tenía ganas desde hace tiempo, y ahora más que se quiere llevar al huerto casar con su adorada. Le increpa que, ya que Reyyan no quiere casarse con él, debería romper el compromiso, ya que de no hacerlo estaría forzando a la afortunada pobre muchacha. A Miran le hace gracia todo el asunto y pone su cara de estar oliendo mierda continuamente.

Definición gráfica de oler mierda

Finalmente le aclara que no va a romper compromiso alguno, y que si tan seguro está de los sentimientos de Reyyan, que vaya mañana y le pregunte a ella misma. Azat flipa, porque lo que ha visto no deja lugar a dudas o eso cree él, y no termina de comprender cómo en tan sólo unas horas puede Reyyan cambiar de opinión. Miran no se achanta y vuelve con lo mismo.

¡¿Cuánto mide Azat?! ¡¿Dos metros y medio?!

Volvemos a la mansión Sadoglu, donde Zehra no deja de mirar a su hija porque la ve más rara que a un perro verde. Al preguntarle, Reyyan confiesa que se ha encontrado con Miran y que éste le ha dicho que desde un principio quiso casarse con ella y no con la gilipollas de la Yaren. Zehra al final confiesa que Miran le ha dicho la verdad, que no pudo contárselo por el abuelo. Reyyan alucina y se arrepiente de haberle dicho que no lo quería.

¡¿Qué tipo de preguntas absurdas son estas?!

¡Pues obvio que sí! Está Reyyan ahora mismo que no hay quien la controle de tanta emoción. Tira la muchacha pa su cuarto y recibe un mensaje de Miran: "¿Qué tengo que hacer para que confíes en mí?" A lo que Reyyan responde: "Tienes que hacer un columpio en el cielo." ¡Cágate lorito con la respuesta!

Definición gráfica de quinceañera enamorada

Llega la noche y Melike despierta a Reyyan porque tiene una nota que Miran le ha mandado mediante paloma mensajera (no concibo otra forma de enviarla para que no se entere nadie en esa casa). En la nota, Miran le pide a Reyyan que baje o entrará él mismo en su casa. Sutil como siempre el chico.

Mientras Miran espera, choca con un misterioso anciano, y éste le pregunta si se le ha caído esto:

¡Si es un cacho piedra!

Miran asiente y reconoce que es un amuleto que le dio su abuela para protegerle del mal pues ya lo puedes ir tirando porque no sirve para nada. El viejales le pregunta que si el amuleto también lo protege del mal que hay dentro de él, y le suelta un parrafada que no nos interesa mucho, y a Miran, por lo que se ve, tampoco.

Una vez se va el hombre, aparece Reyyan, increpando de nuevo a su prometido porque ya hay que estar loco para presentarse allí a esas horas de la noche. Miran, que va a lo suyo, le dice que la va a poner mirando pa Cuenca vayan a dar un paseo juntos ay pájaro, pero Reyyan no quiere, porque como se entere su abuelo se produce el armaggedon.

¿Quién quiere ser secuestrado?

Como no le queda otra que acceder, Reyyan termina yendo con Miran si realmente estaba deseando ir y se la lleva a ese sitio tan alto que tanto le gusta tanto a la chica, sólo que ahora hay un columpio la mar de modenno.

¿Y las telas de arriba son para que me cuelgue cual mono?

En cuestión de horas, Miran ha creado un "columpio en el cielo", porque obviamente el milagro supremo puede hacer muchos milagritos como éste. Reyyan, que de cobarde tiene poco, se atreve con el columpio y nos regalan estampas como ésta.

Me monto yo ahí y estoy vomitando desde el segundo uno.

Al principio todo es fantabuloso, pero Miran cada vez empuja más y más fuerte el columpio chatas, no lo que estáis pensando, y ella lo único que ve es el precipicio que se abre ante ella. Reyyan se acojona pensando que se va a caer, y yo me acojono todavía más pensando que Miran la va terminar matando y ya se va a acabar la serie en el capítulo uno. 

Cuando ya estaba a punto de darle un jamacuco a la pobre Reyyan, Miran la abraza por la cintura, parando de una puta vez el puto columpio de los cojones.

Estando en esa tesitura, él le susurra al oído que no importa lo alto que suba porque nunca la soltará, y siempre que caiga él estará ahí para sujetarla.

Mi yo interno después de esta escena.

Tras esto, Miran la lleva de nuevo a su casa, pero una vez allí se hace el remolón. Anda vete tú, no vete tú, no venga, ¡y entonces agarra a Reyyan de la mano! Guau, cuidao que estamos en Turquía, que estos dos todavía no se han casao, Y YA ESTÁN HACIENDO MANITAS. Como alguien los vea va a arder Roma, Troya y hasta Pompeya. Reyyan quiere hacerse la dura e intenta alejarse, pero Miran tira de su mano y...

¡Un beso en una telenovela turca!

Después de tal momento, a los dos se les queda una cara de tontos que pa qué. Reyyan está ya que se sube por las paredes, así que antes de cometer ningún pecado más, entra corriendo en su casa.

Se me ha aparecido un milagro.

Después de este momento culmen, Reyyan todavía anda en sueños y aparece... tachán tachán... Azat.

Se me han bajado los calores al inframundo.

Azat, convencidísimo de que Reyyan no quiere a Miran después de la escenita que vio el día anterior, le dice rápidamente que va a hablar con el abuelo para arreglar el asunto de la boda, pero ella le dice que ni mijita, que ella quiere a Miran. El pobre de Azat ve que finalmente Miran se ha salido con la suya y se queda con su cara de perrito faldero habitual. Ahhhhh, le hubieras pedido matrimonio antes, chavalín.

Nos acercamos a la noche de henna y Reyyan sale con su madre, su hermana, la Jurado y la Gollum a comprarse los accesorios pertinentes para tal suceso. Lo que no sabe es que, mientras tanto, la Yaren se ha dedicado a quemar todos los regalos que le hicieron para la boda, pero oye, ni un mísero castigo recibe por parte de su abuelo si llega a ser al revés...

Mientras Reyyan está indecisa por las joyas que comprar, aparece Miran de improviso algo nada habitual lo cual no le gusta nada a la Gollum, que si ya tenía cara de muerta, ahora está con cara de leche cortada. Entonces Gül va a demostrar por primera vez que es el mejor personaje de toda la serie, y le chiva a Miran que Reyyan quería un vestido rojo para su noche de henna, pero que finalmente eligieron el que dijo Gollum, el cual es horrendo.

Soy la mejor y lo sabéis.

Miran, ni corto ni perezoso, manda que compren el famoso vestido rojo, y ante la mirada atónita de Zehra y Reyyan, Gül vuelve a la carga:

Lo sabemos todos menos él mismo.

Cuando ya tenemos todas las joyas elegidas, Miran pide que le muestren una tobillera. No sé exactamente qué significado tienen las tobilleras en Turquía, pero a Gollum no le hace ni puta gracia la idea. La Jurado tampoco está muy conforme, pero como es la más grande sabe comportarse como es debido mientras observa cómo Miran se arrodilla ante Reyyan para ponerle la tobillera. Derrepente aparece Azat de la nada, pidiéndole explicaciones a Miran de por qué está haciendo eso what?! y el tío va y le arrea una hostia a Miran que lo deja sangrando por la nariz.

¡¡¿Pero qué está pasando?!!

Miran se controla para no pagar a Azat con la misma moneda, pero la tobillera se la queda. Anda que no. Ya en su casa, los guionistas deciden hacernos un regalo al mostrarnos este milagro:

hdfgashgasdhasdhsdhfjgasdgfskafh

Como suele ser habitual en las telenovelas, habemus un flashback del momento columpio, y es que Miran se está enganchando hasta las trancas de Reyyan, pero él no lo quiere ver...

Mira que eres cabezón.
Quítate ese flequillo a ver si así se te despejan las ideas.

Reyyan, por su parte, está preocupada por el suceso vivido, no sea que Miran se arrepienta y no quiera casarse con ella já pero esa no va a ser su mayor preocupación, porque entonces aparece la Yaren y le lanza una mardición gitana por haberle quitado el novio.

Amanda cada vez que Yaren abre la boca.

Al día siguiente, vuelven la Jurado y la Gollum a presentarse en la mansión Sadoglu con más regalos, entre ellos uno de parte de Miran.

Pero a ver, ¡¿qué hace el novio regalando el vestido de novia?! Si él no puede ver el vestido, ¡que eso da una mala suerte que te cagas! En fin, aquí se monta un pifostio por una tobillera, pero luego va el novio a comprar el vestido de novia y no pasa nada. 

No entiendo nada.

La Gollum medio que casi se echa a llorar cuando ve el vestido de novia. Seguimos sin entender su cara de muerta y cuál es su problema, pero en cuanto se queda a solas con la Jurado, le dice que se larga de allí, que les plante la excusa de que se ha puesto mala porque ya no aguanta más.

Pues hala, vete y no vuelvas más, tía pesá, cara muerta.

Cuando Reyyan se está poniendo su vestido rojo para la fiesta de henna, recuerda aquel sueño extraño que tuvo donde se le decía aquello de "no vayas al rojo" y le entra un biruji por el cuerpo muy extraño. Que digo yo que ya se podía haber acordado de lo del rojo antes de comprar el vestido, ¿no?

Por otro lado tenemos a Miran pidiéndole a Firat que conduzca más rápido porque quiere ir a la fiesta de henna. Firat flipa de que su amigo quiera ir, y ya lleva tiempo notándolo una mijina extraño...

Otro que se ha dado cuenta.

Miran se cabrea y dice que no está enamorado no qué va, que lo único que quiere es seguir con la mentira y hacerle ver a Reyyan que sellará su amor por ella con la henna. Claro, claro...

Y esta es la carita que se le queda cuando ve a Reyyan con su vestido de henna:

No, si él no está enamorado...

Ya estamos otra vez con la combustión.

Reyyan entonces es consciente de algo sumamente importante.

La muchacha toda feliz ella, decide ponerle henna con la misma que ella tiene en sus manos. Y ahora sí, su amor está sellado.

Nos falta otro maldito beso pero deciden dejarnos con las ganas porque Reyyan vuelve a entrar en su casa, y entonces aparece nuestra amiga Gollum pos no te habías ido?!, de nuevo muerta en vida y medio llorando, echándole en cara a Miran que está muerta en vida lo que yo decía y que a él lo que le pasa es que tiene miedo de perder a Reyyan si ella se entera. ¡¿Pero enterarse de qué?! ¡Habla claro de una maldita vez!

¿Me lo repiten?

Estoy que no doy crédito a nada. Absolutamente a nada. Pero por si fuera poco, Reyyan sale de nuevo a la calle y se encuentra a la parejita de esta guisa.

Ay Alá, que fijo que lo ha escuchado todo, verás tú la que se va a armar ahora...

Mejor personaje: Miran.

Mejor escena: el momento columpio creo que es insuperable, aunque hay varios momentos mojabragas memorables en este capítulo.

Puntuación:

Liam indica que éste es un buen comienzo.

Serie: Hercai.

Capítulo: 1x01

Duración: 2 horas, 43 minutos.